El vivir solo siendo una persona mayor sin necesidad de una asistencia domiciliaria ni tener asignada ningún tipo de dependencia puede ser una experiencia liberadora y gratificante. Sin embargo, conlleva una serie de desafíos únicos que merecen una planificación cuidadosa y considerada. Aquí te presentamos algunos consejos prácticos para garantizar que esta etapa de la vida se desarrolle de manera segura y enriquecedora.
8 Consejos de Toda Una Vida.
- Mantén una Red de Apoyo Fuerte: A pesar de vivir solo/a, es esencial contar con una red de apoyo sólida. Mantén contacto regular con amigos, familiares o vecinos cercanos. Tener a alguien a quien recurrir en caso de emergencia o simplemente para compartir momentos agradables puede marcar una gran diferencia en la vida diaria.
- Conoce tus Recursos Locales: Investiga los recursos y servicios disponibles en tu comunidad. Desde programas sociales hasta servicios de entrega a domicilio, existen opciones diseñadas para brindar apoyo a las personas mayores que viven solas. Conocer estos recursos puede proporcionar ayuda práctica y conectar con otras personas en situaciones similares.
- Prioriza la Seguridad en el Hogar: Asegurar un entorno seguro es fundamental. Realiza pequeñas adaptaciones en casa, como instalar barras de apoyo en el baño, mejorar la iluminación y eliminar posibles riesgos de tropiezos. Estas medidas pueden prevenir accidentes y promover un ambiente seguro y cómodo.
- Mantén una Rutina Saludable: El cuidado personal es clave. Mantén una dieta equilibrada, haz ejercicio regularmente (dentro de tus posibilidades) y asegúrate de seguir los consejos médicos. Además, no subestimes el poder del descanso adecuado; dormir bien es fundamental para mantener la salud física y mental.
- Sé Proactivo con tu Salud: Programa exámenes de salud regulares y mantén tus citas médicas al día. No ignores señales de advertencia o cambios en tu salud; busca ayuda médica si es necesario. La prevención y el seguimiento regular son esenciales para mantener un estilo de vida independiente y saludable.
- Estimula tu Mente y tu Espíritu: El aprendizaje y la participación activa son elementos clave para el bienestar mental. Lee libros, haz crucigramas, aprende algo nuevo o participa en grupos de interés. Mantenerse mentalmente activo y comprometido es crucial para mantener una mente sana y estimulada.
- Busca la Compañía: El aislamiento puede ser un desafío. Busca actividades sociales que disfrutes, como unirse a grupos de interés, voluntariado o participar en actividades comunitarias. Estar rodeado de personas con intereses similares puede brindar compañía y enriquecer tu vida social.
- Planificación Financiera y Legal: Considera la planificación financiera y legal para el futuro. Asegúrate de tener documentos importantes en orden, como testamentos y poderes notariales. Además, evalúa tu situación financiera y considera asesoramiento profesional si es necesario.
La asistencia domiciliaria. Una necesidad de futuro.
Vivir solo como persona mayor no tiene por qué ser solitario o limitante. Es una oportunidad para explorar intereses personales, mantener la independencia y disfrutar de la vida a tu propio ritmo. Celebra tu autonomía y haz de esta etapa una experiencia enriquecedora.
No obstante, en algún momento de nuestra vida es necesaria la asistencia domiciliaria y/u hospitalaria ya que nuestras capacidades se ven afectadas por el paso del tiempo y nuestra dependencia se hace plausible. Tener a una persona que nos ayude en nuestro día a día facilita la realización de nuestras tareas, por ello en Toda Una Vida, buscamos la profesionalidad de nuestros/as auxiliares de ayuda a domicilio, para que proporcionen la asistencia idónea y especializada a cada uno de nuestros/as usuarios/as.